Hace unos días estuve de escapada por la capital alemana:
Berlín. Fue un viaje que prepare en cuestión de horas, cuando la familia me
notifico que tenía 5 días libres para mí, que podía hacer lo que quisiera; en
vista de ello, me di a la tarea de ver a donde me iba. En primer lugar, la idea
era irme a Praga, pero no era tan fácil preparar un viaje a Praga de un día
para otro, así que fui más práctico: decidí quedarme en Alemania. En mis planes
había estado el visitar Berlín. Y me dije: ¿Por qué no Berlín?
No fue fácil, un viernes a las 2 de la tarde buscando
transporte para el día siguiente. El viaje en tren [www.bahn.de] que por lo
regular cuesta 29 €
[$ 480] para ir, pero como era de un día para otro, me saldría en 72 € [$
1,160], un poco más del doble, así que en primera instancia el tren estaba
descartado; pero tenía otra manera de viajar: compartiendo auto. En Europa es
común que a través de una página (http://www.mitfahrgelegenheit.de)
las personas ofrezcan asientos a desconocidos para aminorar gastos. Así que
buscando el viernes, me encontré con una oferta que salía desde Kronach
(a 5 Km de mi pueblo) hasta Berlín el sábado a las 10 am por solo 20 € [$ 330] así que me puse en contacto
con el conductor para apartar mi asiento. Quedando todo arreglado con el
transporte de ida, solo me faltaba buscar la manera de regresarme; así que
buscando por diferentes medios de transporte, me topé con una línea de
autobuses [http://meinfernbus.de]
que me llevaba desde Berlín a un pueblo a 40 Km del mío por solo 18 € [$ 290]; de allí tendría que tomar
el tren hasta Kronach.
Teniendo
resuelto lo del transporte, buscar hotel. No era fácil pues de un día para otro
es difícil, caro, complicado, etc. Me metí en mi buscador favorito de hoteles
Booking [http://www.booking.com];
encontré un hostal disponible por 15 € [$ 250] la noche en habitación compartida. La verdad que solo
necesitaba una cama para llegar a dormir en la noche, así que reserve para 4
Noches/5 Días en el barrio de Charlottenburg en el Oeste de Berlín.
Resolviendo
las dos cosas más importantes: Transporte/Hospedaje, el viernes por la noche me
puse a buscar en internet los puntos claves de la ciudad que tenía que conocer,
para no llegar tan perdido, mientras hacia la maleta, revisaba la información,
hacia una pequeña lista de cosas por hacer. Me dormí como a las 2 am. Ya el
sábado a las 7 am estaba más que despierto, listo para arreglarme e irme al
punto de encuentro acordado por el conductor: la Bahnhof de Kronach a las 10:00
am. De mi pueblo a Kronach me llevo Opa [el abuelo de los niños] a eso de las
9:30 am. Justo a las 10 en punto de apareció Mike, el chico que iba a Berlín.
Nos presentamos, subí mis bolsos, le dije: Ich spreche Deutsch nicht perkekt,
jajaja. Y emprendimos el viaje a Berlín. El mismo duro casi 5 horas [por lo
regular son 4 horas, pero había algo de lluvia]. Durante el viaje pude apreciar
paisajes, pueblos que se asomaban, pero sobre todo mucha tranquilidad; creo que
sería la mejor palabra que le va a Alemania: tranquilidad.
Llegamos
a Berlín a eso de las 2:30 pm. Le dije a Mike que me dejara en una estación del
metro para poder ir al Hostal. Y así fue; después de recorrer varios minutos la
ciudad, mis impresiones no se hicieron esperar: Berlín es el D.F. pero en
Alemania; mucha industria, muchas fábricas a las afueras de la ciudad te dan la
bienvenida, pero luego empiezas a adentrarte, a ir viendo paisajes, casas, plazas,
lugares, etc. Me dejo en la estación Ostkreuz, en Berlín del Este. Y es aquí
donde empieza la aventura.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario